LAS 6 ÁREAS MAESTRAS DE NUESTRA VIDA

Conocer cuáles son las áreas maestras de nuestra vida es esencial para organizarnos

REFLEXIONES

David Hernández

7/27/20254 min read

Se acabaron las vacaciones y. como cada fin de verano, toca planificar mi rutina de los siguientes meses de aquí hasta fin de año.

¡Un momento! ¿Vamos a planificar, así, a pelo? ¿Tenemos claro lo que queremos lograr? Y si fuera así, ¿tenemos claro PARA QUÉ queremos lograr lo que queremos lograr?

Planificamos, organizamos, hacemos listas de tareas, tachamos, repetimos, quedamos con gente... y así una y otra vez. Pero ¿por qué? Y, sobre todo, ¿para qué?

No sé si he conseguido transmitiros esa sensación que a veces me asalta de vivir como pollo sin cabeza. Es decir, de hacer las cosas para sobrevivir y porque es lo que toca, sin más. Pues hoy lo que quiero reflexionar con vosotros es la necesidad que tenemos como seres humanos de hacer lo que hacemos y vivir como vivimos teniendo claro su sentido. Y si no me creéis, preguntad a Viktor Frankl, o sea, leed El hombre en busca de sentido, y os convenceréis de ello.

Por eso, propongo que planifiquemos nuestras rutinas en torno a las ÁREAS FUNDAMENTALES DE NUESTRA VIDA. ¿Y cuáles son estas? Yo propongo las seis que podéis ver en la imagen destacada del post. Las he representado en una pirámide tipo Maslow para ir de la más básica hasta la más elevada. A la izquierda tenemos una flecha que nos indica el camino a seguir para ir ascendiendo, mientras que a la derecha he elegido un hábito estrella para cultivar cada una de las áreas (o subáreas) fundamentales. Vamos a ello:

  1. SALUD. Y he subdividido a este área en otras tres: salud física, salud mental y salud emocional. Como hábito estrella de la salud física he escogido el deporte (sí, ya sé que hay muchos otros como el descanso, la alimentación, la respiración, etc., pero yo he escogido el deporte por ser menos obvio y más transformador), de la salud mental la meditación y de la salud emocional la atención, ya que lo que nos permite canalizar nuestras emociones de manera saludable es precisamente la capacidad de prestarles atención.

  2. AUTOCONOCIMIENTO. Subimos un peldaño en nuestra pirámide y, una vez cuidada nuestra salud, podemos continuar por conocernos a nosotros mismos. Hombre, conócete a ti mismo, rezaba el dintel del oráculo de Delfos. A partir del autoconocimiento podremos progresar en todo lo demás. Como hábito estrella del autoconocimiento tenemos la lectura. Con los buenos libros (y con las buenas películas, los podcasts... que para mí también son otra forma de leer) nos conocemos y re-conocemos en los personajes y situaciones.

  3. RELACIONES. Una vez hemos caído en la cuenta de la importancia del autoconocimiento, llega el turno a las RELACIONES. Los seres humanos somos seres relacionales, no podemos vivir aislados sin enfermar. Para mí, tenemos 4 tipos de relaciones básicas: con nosotros mismos, con la pareja, con la familia y con los amigos (también con los vecinos, con los compañeros de trabajo, etc). El hábito estrella es cuidar de todas ellas.

  4. ECONOMÍA. Es evidente (aunque a mí mismo me ha constado muchos años verlo) que vivimos en un sistema capitalista y la economía es fundamental: desde que nacemos (e incluso antes) hasta que nos morimos (e incluso después) estamos utilizando el dinero. Por tanto, debemos considerar que es un área fundamental en nuestra vida. El hábito estrella sería dar valor. Esto significa que debemos ser cada vez mejores trabajadores (aumentar nuestro valor como empleados), mejores empresarios (aportar cada vez mejores bienes y servicios a la sociedad) y llevar un control de nuestros ingresos y gastos (presupuesto) que nos permita vivir con consciencia y equilibrio. Que nuestro dinero sea el reflejo del valor que aportamos al mundo.

  5. PROPÓSITO. Seguimos ascendiendo y llegamos a eso que nos hace levantarnos por la mañana con la ilusión de ofrecer algo al mundo. Es el ikigai de los japoneses y si no sabéis cuál es el vuestro os animo a que lo encontréis. Para ello tomad una hoja y divididla en cuatro cuadrantes. En el primero escribid aquello que os gusta hacer, en el segundo aquello que hacéis bien, en el tercero aquello por lo que os podrían pagar y en el cuarto aquello que haríais como contribución al mundo. Vuestro ikigai será aquello que habéis escrito en los cuatro cuadrantes. Como mi propósito es la escritura, debo cultivar el hábito de escribir cada día. ¿Y vosotros? ¿Habéis encontrado el vuestro? ¿Y cuál sería vuestro hábito estrella?

  6. ESPIRITUALIDAD. Llegamos al último escalón. La espiritualidad es el área maestra de la trascendencia y por ello da sentido a todas las demás. Va más allá de nosotros mismos. Es el para qué existencial de cada ser humano. Entiendo que es natural en el ser humanos el sentimiento de haber venido a la existencia para hacer algo más grande que él mismo. Por eso el hábito estrella que he escogido es la gratitud, el agradecer cada día por todo lo que la vida nos aporta y por las posibilidades de aprender y desarrollarnos en ella. Si eres religioso, puedes llamarle oración: para mí, en este nivel oración y gratitud son las dos caras de la misma moneda.

Para terminar, os animo a fijaros en la parte izquierda del dibujo. Se trata de cómo vamos ascendiendo de unos peldaños a otros. Debemos partir del EQUILIBRIO para conquistar el ORDEN mediante la DISCIPLINA. Por eso es tan recomendable empezar vuestro camino ordenando vuestra casa o vuestra habitación. El orden es de Dios (o del Universo, del Cosmos o como lo quieras llamar): ordenando nuestras cosas se ordena también nuestra cabeza.

¡Ahora sí! Ahora ya podemos abrir nuestro Google calendar y planificar nuestras rutinas cuidando las áreas fundamentales de nuestra vida, porque ahora sabemos que todo tiene un sentido.

¡Vaya post largo e intenso me ha quedado! Si has llegado hasta el final, gracias de corazón. Y si te apetece, déjame un comentario. Me encantará leerte.